30 Oct La Laguna. «Hemos apostado por la justicia social y el bienestar de la gente»
Por José Luis Reina, para Canarias 7
Luis Yeray Gutiérrez se hizo con la alcaldía de San Cristóbal de La Laguna tras conseguir un pacto progresista que acabó con un largo periodo de poder de Coalición Canaria. Se convirtió así en el tercer alcalde socialista del municipio, tras Pedro González y el breve periodo de Pepe Segura.
Ahora, a punto de agotarse la legislatura y ya con la mirada puesta en la siguiente contienda electoral, el socialista repasa los grandes ejes de futuro para el municipio que dirige, con proyectos ambiciosos y de vital importancia para La Laguna.
El joven alcalde reconoce que CANARIAS7 es un periódico que sigue a diario. «Acabo de cumplir 37 años, así que no había nacido cuando salió el primer número de CANARIAS7, pero ha sido un periódico que he tenido muy presente durante toda mi vida, porque siempre he seguido con mucho interés y curiosidad la prensa de las islas», asegura.
Haciendo balance de legislatura, el alcalde lagunero señala que «todas las administraciones públicas hemos tenido que lidiar en estos años con una situación muy complicada debido a la pandemia, y ahora afrontamos una nueva crisis derivada de la guerra de Ucrania y el encarecimiento de la energía y el transporte, que está afectando a las contrataciones de obra pública.
Y con todo, conseguimos sacar adelante los grandes compromisos que asumimos al llegar al gobierno». Luis Yeray se refiere, entre otras acciones, «al proceso de reposición de las viviendas de Las Chumberas, que se encuentra ya muy avanzado; o la consolidación de las ruinas de la antigua iglesia de San Agustín, en las que ya llevamos meses trabajando; o el regreso del Mercado municipal a su antiguo emplazamiento de la plaza del Adelantado, para el que antes de fin de año esperamos sacar a licitación el encauzamiento del barranco de La Carnicería».
El socialista se muestra especialmente satisfecho con la labor centrada en las personas, de la que asegura que «más allá de las grandes obras, hemos apostado directamente por las personas y la justicia social, con los mayores presupuestos de la historia del municipio en servicios sociales, con un incremento de las políticas de cuidados para mayores, de atención a la discapacidad, apoyo a las familias con menos recursos, y en general a las personas más vulnerables».
Además, prosigue, «hemos impulsado la construcción de un nuevo parque público de viviendas para poder ofertar alquileres a precios razonables, cuando llevábamos más de una década sin nuevas viviendas públicas en el municipio». Uno de los objetivos que se marcó el consistorio lagunero tras la gran crisis ocasionada por la pandemia fue impulsar y apoyar al comercio.
«La Laguna se precia de tener uno de los sectores comerciales más pujantes de Canarias. Desde el Ayuntamiento hemos redoblado las ayudas a este sector que tiene una gran capacidad de dinamización económica y es uno de los principales generadores de empleo». ¿Y cómo se imagina el alcalde su municipio dentro de 40 años? «Me imagino una ciudad sin la cicatriz de la TF-5; una ciudad unida por una gran rampa desde la rotonda del Padre Anchieta hasta Los Rodeos. Estoy convencido de que esta es la mejor solución para La Laguna, porque permitirá sacar de nuestra trama urbana más de 80.000 vehículos diarios y ganaremos una enorme superficie para las personas».
Gutiérrez quiere imaginarse «una ciudad fiel a su idiosincrasia, sabiendo combinar el cuidado de su legado histórico y su patrimonio monumental con la modernidad y el desarrollo de nuevas infraestructuras», además, apunta que «La Laguna de 2062 será una ciudad plenamente sostenible, capaz de autoabastecerse energéticamente y ejemplo de convivencia entre lo urbano y el medio ambiente.
En definitiva, una ciudad de la que las laguneras y los laguneros puedan seguir sintiéndose orgullosos, y en la que cualquier persona que la visite pueda sentirse es su propia casa». Dentro de este ejercicio de imaginación, el socialista apunta que «nosotros trabajamos para construir un modelo de ciudad integradora y abierta, una ciudad a escala humana, donde los peatones vayan ganando cada vez mayores espacios para la convivencia».